En muchas ocasiones, el estrés de la vida diaria en las ciudades hace que muchas personas sueñen con la posibilidad de poder vivir en una casa rústica en plena naturaleza alejados de todo ruido. Es sin duda el mejor lugar para desconectar y disfrutar del aire limpio. El problema es que no siempre es posible, más cuando se vive en grandes ciudades donde el campo suele quedar muy lejos de la urbe. A pesar de esto, siempre hay gente que tiene la posibilidad de poder vivir rodeado de naturaleza. Es el caso de la familia propietaria de esta casa rústica de la que hoy os queremos hablar. Una casa con un bonito diseño que seguro llamará la atención de más de uno.
Un refugio donde descansar
El diseño de esta casa rústica, fue encargado al estudio de arquitectura Samsel Architects. Está ubicada en una zona boscosa de Mill Spring, en Carolina del Norte, y fue creado como refugio donde sus dueños poder desplazarse para disfrutar de la Naturaleza. La zona ofrece unas bonitas vistas con pastos ondulantes y hermosos paisajes de montaña.
Además de contar con un diseño exterior muy agradable a la vista, los arquitectos también contaron con el apoyo de la empresa Allard + Roberts Interior Design para crear un interior que transmitiera tranquilidad. Para ello se apostó por el uso de una paleta de tonalidades neutra, acentuada con los tonos de la madera natural en todas partes. Para conseguir una mayor entrada de luz, se apostó por la instalación de una pared de ventanas.
Líneas rectas y sencillas
Para aportar tranquilidad al interior de la vivienda, se apostó por el uso de mobiliario de líneas rectas y sencillas. Esto lo vemos claramente tanto en la cocina como en el comedor. En la cocina nos encontramos dos islas que no cuentan con armarios superiores, lo que permite poder ver la estancia de un lado al otro.
Al lado de la cocina, hay una mesa de comedor que cuenta con un asiento fijo pegado a la ventana. El lugar ideal para poder disfrutar de las vistas de la zona mientras comes o bien tomas un café.
Sala de juegos
Si nos centramos en la planta baja de la vivienda, nos encontraremos una gran sala de juegos. En el extremo de esta sala, está ubicado una gran televisión, que cuenta con puertas corredizas de madera que lo ocultan cuando no es utilizado.
Esta parte de la vivienda, también cuenta con un par de mesas de juego, encontrándonos en su parte final un bar y ventanas de acordeón que se abren hacia el porche.
Zonas privadas en la segunda planta
En la segunda planta, es donde nos encontramos las estancias privadas. Para acceder a ellas hay que subir por unas elegantes escaleras blancas y de madera.
En una de las habitaciones, una pared decorativa de madera agrega un suave toque natural a la habitación.
En otro de los dormitorios, nos encontramos un asiento de ventana que recorre toda la pared.
¿Qué os ha parecido esta casa rústica construida en plena naturaleza? ¿Os gustaría poder vivir en ella? Animaros y compartir con todos nosotros vuestros comentarios. ¡Os estamos esperando!