A la hora de decorar las ventanas y balcones de nuestro hogar, el uso de cortinas es algo imprescindible. Además de aportar intimidad y calidez a la estancia, también son el complemento perfecto para dar un toque especial a la decoración. La clave está en saber elegir el tipo de cortina que mejor se adapta a nuestras necesidades. De entre todos los tipos, en los últimos años, los paneles japoneses vienen destacando como una de las mejores opciones. Se trata de una opción muy práctica, elegante, baratos y fáciles de montar.
Un toque oriental en nuestro hogar
A la hora de decorar nuestro hogar, podemos optar por diferentes estilos decorativos: nórdico, moderno o clásico son algunos ejemplos. Pero uno de los que tiene mayor tirón en la actualidad es la decoración oriental. Con esto no queremos decir que haya que utilizar todos los elementos tradicionales de este país oriental, sino que el simple uso de paneles japoneses es más que suficiente para conseguir ese ambiente.
Estos paneles son perfectos para controlar la entrada de luz a la estancia. Se tratan de paneles verticales, estrechos y alargados que se desplazan por medio de un riel permitiendo su desplazamiento de forma sencilla.
Cuando se quiere dejar pasar la luz del exterior, se recorren hacia un lado, y cuando queremos más intimidad, se mueven hasta tapar completamente toda la ventana.
Lo mejor de estos paneles, es que resultan muy sencillos de instalar, por lo que cualquier persona lo podrá hacer sin necesidad de contratar a ningún experto.
¿Cuándo elegir el panel japonés?
Puede darse el caso de que te guste este tipo de paneles pero tengas dudas de si es la mejor opción para tu decoración. Hay que decir que este tipo de paneles suelen combinar muy bien con cualquier otro estilo decorativo, por lo que esto no será ningún problema. Por ejemplo, pueden ser utilizados en salones modernos donde el minimalismo esté muy presente, ya que el diseño de los paneles japoneses también son muy sencillos.
Aunque su uso más habitual puede ser en el salón del hogar, esto no significa que no puedan instalarse en otras estancias como puede ser un dormitorio o bien en un cuarto infantil. La clave en este caso está en elegir la tela del panel japonés, teniendo la ventaja de que como cada panel es independiente, puedes mezclar diferentes tipos de tela, estampados o tonalidades en un mismo espacio.
Fácil mantenimiento
Anteriormente hemos comentado que los paneles japoneses resultan muy sencillos de instalar, pero no solo hay que destacar esto, sino también que cuentan con un mantenimiento muy sencillo, algo que es de agradecer hoy en día.
A la hora de limpiar estos paneles, lo único que deberemos hacer es despegar el velcro que cada panel utiliza para estar unido a su riel correspondiente. También será necesario quitar el contraseño que suelen llevar en la parte inferior y que ayuda a mantener estirado el panel. Una vez hecho esto, se lavaría como si de otro tipo de cortina se tratase.
Una vez limpio, se colocaría de igual forma y ya lo tendríamos listo como si fuera nuevo.
Así que ya sabéis, en el caso de no saber como «vestir» vuestras ventajas, los paneles japoneses pueden ser vuestros grandes aliados. No lo dudes y apuesta por ellos. Seguro que no te arrepentirás.