Situada en uno de los rincones más hermosos de toda Suecia, la isla de Ingarö, está diseñada por el arquitecto Gabriel Mínguez nos sorprende por sus líneas rectas y amplios espacios en un diseño inspirado en la arquitectura japonesa, donde no podía faltar un amplio jardín que ayuda a esta vivienda contemporánea a mezclarse con el medio que lo rodea.
La fachada principal de la casa está orientada hacia el agua y gracias a unos grandes cristales se puede observar todo el entorno, además de dejar pasar luz natural durante gran parte del día.
La puerta principal de la vivienda conduce a un hall de entrada que se abre aún más cuando se llega al área de la cocina. En una sección separada en la planta baja nos encontramos tres dormitorios y un baño grande con ducha y sauna. Para su decoración interna, se ha utilizado grandes rocas del entorno que le da un toque de gran originalidad. Por último cabe destacar la gran escalera de diseño de metal que conduce a un gran dormitorio principal con un gran baño.
