En los últimos años, el mundo de la decoración de interiores ha evolucionado mucho dando paso a nuevos materiales que han llegado con la intención de crear ambientes más novedosos y acogedores. Uno de estos materiales ha sido el hormigón pulido, un material que está formado a partir de una mezcla de áridos, agua, pigmentos y aditivos y, que una vez seco, es pulido para darle ese aspecto tan llamativo y que todo el mundo conoce. Hay que destacar que se trata de un material muy resistente y que puede dar mucho juego dentro de cualquier estilo decorativo que queramos dar a un hogar.
Usos del hormigón pulido para decorar interiores
El hormigón pulido se ha venido utilizando, desde hace muchos años, para cubrir los suelos de naves industriales, establecimientos comerciales u oficinas. Pero cuando muchos de estos lugares se empezaron a utilizar para crear lofts, ese suelo se mantuvo debido a su estética industrial. Aunque hoy en día sigue siendo un material que se utiliza mucho para el revestimiento de paredes o el suelo, el hormigón pulido puede dar mucho juego a la hora de formar parte de otros elementos decorativos como puede ser el mueble del salón, tarima para colocar el colchón en un dormitorio e incluso diseñar un original sofá para el salón.
Aunque el hormigón pulido está asociado al estilo decorativo industrial o rústico, a la hora de la verdad, es un material muy versátil que combina perfectamente con cualquier otro estilo de decoración como puede ser el nórdico o uno más clásico.
Además, se trata de un material que combina muy bien con cualquier material, como puede ser la madera, las fibras naturales o el algodón. Gracias a esta combinación, es posible crear un ambiente más cálido y que llamativo a los ojos de quien visite nuestro hogar.
Qué ventajas ofrece el hormigón pulido a la decoración de interiores
Que el hormigón pulido se haya convertido en un material cada vez más utilizado dentro de la decoración de interiores no ha sido por casualidad, sino por las muchas ventajas que ofrece. Veamos a continuación algunas de las más importantes.
Gran resistencia
Como ya hemos comentado anteriormente, una de sus principales características es que se trata de un material muy resistente, lo que hace que sea perfecto para sitios de mucho tránsito o que pueda sufrir la acción de la climatología.
Material que ofrece gran durabilidad
Gracias a su composición y al tratarse de un material pulido, ofrece mejores resultados ante golpes u otras acciones, lo que hará que esté como el primer día mucho más tiempo.
Mantenimiento sencillo
También es importante destacar que se trata de un material que ofrece un mantenimiento muy sencillo, algo que es de agradecer por parte de las personas. Suele ser suficiente con pasarle una mopa que se encargue de atrapar el polvo. Para su limpieza, es suficiente con utilizar un poco de agua y un detergente con PH neutro.
Se le puede dar color
Si hablamos del color del hormigón, a la mayoría se nos viene el gris, pero no es la única opción, ya que se le puede dar un color que hayamos elegido, como por ejemplo el rojo, verde, azul… De esta forma, se puede conseguir un hormigón de color que combine mejor con el resto de elementos decorativos.
Sensación de mayor amplitud
Al tratarse de un revestimiento continuo, se crea una sensación visual de mayor amplitud, ideal para aquellas zonas que cuentan con un espacio reducido.
En el caso de que estés buscando ideas para dar un aspecto decorativo diferente en tu hogar, el hormigón pulido puede ser aquello que tanto estabas buscando. No lo dudes y apuesta por él, seguro que no te arrepentirás del resultado final.