El estudio de arquitectura DMVA descubrió una pequeña casita en un bosque al lado de Brujas (Bélgica) a tan solo quince minutos de la ciudad y decidieron darle otro toque un poco más moderno, eso sí, conservando su estructura y la planta original. Para algunos, tener una cabaña o una casita en el campo, significa tener un lugar donde descansar y disfrutar del relax y del comfort que nos proporciona la naturaleza, pero para los arquitectos de DMVA, les supuso todo un reto.
Remodelaron la pequeña cabaña como un lugar apacible donde pasar las vacaciones con una estética minimalista que queda muy bien con el entorno boscoso. La vivienda es ideal para las calurosas noches de verano para disfrutar con familiares y amigos de una apacible barbacoa, por ejemplo.